"Ritmo" - Obra propia, acrílico
En esta nota les daré algunos consejos sobre cómo cuidar una obra de arte, propia o adquirida. Es muy importante saber cómo hacerlo, sobre todo si hemos comprado una como inversión o para iniciar una colección.
Embalaje
Cuando compramos una obra de arte, lo primero que debemos asegurarnos es de transportarla sin que sufra daños. Es muy común que esto ocurra también durante una mudanza por no realizar un correcto embalaje, con materiales de protección adecuados. Dependiendo del tipo de mudanza y de la distancia a recorrer, se pueden realizar diferentes embalajes para cuidar las obras, no duden en invertir unos pesos más en esto, pues redundará en beneficios a largo plazo.
Todas las obras de arte requieren un embalaje específico, ya que no es la misma protección la que necesitan las obras pictóricas que una estructura. Los materiales más comunes que se utilizan para embalar las obras son el cartón, polyfon, nylon, plástico, film y madera para crear estructuras de protección, siendo la madera lo más conveniente en el caso de las distancias más largas, ya que es un material más resistente.
Los cuadros hay que tener sumo cuidado de no ubicarlos en cajas unos sobre otros porque se pueden dañar tanto la pintura en sí como los marcos y siempre se debe cuidar que no se rocen los cantos, para lo cual se recomienda utilizar separadores.
En caso de que el transporte sea de larga distancia o internacional, contrata un seguro, para cubrir cualquier incidente durante el viaje.
Si el trayecto es corto y la vamos a transportar nosotros en un vehículo, debemos tomarla de los lados con ambas manos y evitar tocar la superficie de la pintura. No la tomen del alambre o cordel ya que puede desbalancearse y sufrir algún golpe.
Los bastidores tienen detrás en las esquinas unas trabas de refuerzo para mantener la obra en escuadra, cuidado de no tocarlos o aflojarlos, pues eso provocará que cuando querramos enmarcarla, quede fuera de escuadra y salga más caro el trabajo. Cuando la apoyemos en el suelo, lo haremos con cuidado de no golpear o marcar alguna de las puntas.
Embalaje con nylon de burbujas de una pintura
Refuerzo del bastidor
Cuidados especiales y limpieza
En el momento de colgarlas es de suma importancia ver la ubicación, pues las pinturas al óleo y las de acrílico son muy susceptibles a la luz y el calor, no deberá colocarse en un lugar en donde los rayos del sol le den en forma directa, porque esto alterará el tono de los colores. Por el contrario, si la colocamos en un lugar muy oscuro, el color de los óleos se oscurecerá.
No colgar el cuadro sobre una chimenea que se use. Es el mejor método de ver como en pocos años se oscurece.
No colocar un cuadro en la cocina. Los humos y grasas de la cocción se depositaran en la superficie y lo arruinan.
No colocar pinturas cerca de fuentes de calor intenso (radiadores, chimeneas, etc.), tampoco bajo el flujo directo de un aparato de aire acondicionado, ya sea de frío o de calor.
Las pinturas a la acuarela y el pastel tienen que recibir poca luz y nunca directa, (60 lux máximo) ya que la vulnerabilidad de estos colores a la luz es muchísimo mayor que la de los óleos y acrílicos. Hay que enmarcarlas con vidrio, recomiendo que lo haga un especialista, ya que el soporte y material son muy sensibles a la humedad y la restauración luego es prácticamente imposible. Debe haber un espacio ínfimo entre vidrio y obra, si además puede emplear un "paspartout" o fondo de papel, libre de acidez, mejor.Lo mismo para las obras en pastel, que deben llevar una laca fijadora para evitar deterioro del material.
Quitar el polvo es una tarea que debemos realizar cada tanto. Para realizar esta tarea, nada mejor que un pincel de cerdas suaves, con el cual retiraremos con suavidad el polvo que se ha depositado sobre la misma.
!!!! *Bajo ninguna circunstancia debemos mojar la pintura al óleo para limpiarla y mucho menos las realizadas en acrílico.
La parte de atrás del cuadro, también debe ser controlada, ya que pueden criar insectos de humedad o termitas. Si notamos pequeños agujeros en la madera, la presencia de larvas, o polvo de aserrín, consultemos a un especialista para erradicarlos. Si la pintura se encuentra cerca de otras, revísalas a todas y saca las que se encuentren infectadas, para que no contagien al resto.
La humedad excesiva provoca la aparición de hongos y mohos. Si en su vivienda tiene este problema, no cuelgue el cuadro cerca de estas zonas.
Otra forma de prevenir los mohos es creando una corriente de ventilación en la trasera del cuadro. La forma de hacer esto es colocando dos pequeñas alcayatas en los extremos inferiores del marco, de forma que el borde inferior de este no toque la pared y permita su ventilación constante.
No cuelgue una pintura original en un cuarto de baño. Los frecuentes excesos de humedad no tardarán en dañarlo.
Esculturas
Las esculturas requieren de un embalaje diferente, ya que es necesario que no tengan movimiento y queden firmes para que no se dañen. El transporte se puede afianzar por una serie de embalajes , que depende en gran medida del nivel de delicadeza e importancia de la obra:
* Burbuja de plástico. La obra tiene que estar totalmente envuelta en la burbuja de plástico, que está forrada con un material especial que hace que la obra no transpire.
* Petaca. Una vez envuelta en la burbuja de plástico, se puede introducir en una especie de contenedor con tapa que la protege mucho más.
* Jaula de madera. Sirve para fijarla y envolverla en láminas de goma espuma que la protegen de los golpes.
* Caja de madera. Es la más usada, la más profesional dado su resistencia. Normalmente son usadas para todas las exposiciones temporales, dado su facilidad de manejo también. Los clavos de las cajas se sustituyen por tornillos, así no hay probabilidades de que uno de ellos raje la obra.
Embalaje de una escultura
Cuidado y limpieza
En el caso de las esculturas depende del material con que estén hechas será la forma de limpiarlas. Mucho cuidado! El cuidado cotidiano sería pasarle un pincel suave para quitar el polvillo.
Si son en mármol usar agua tibia y bicarbonato, frotarlo suavemente con una esponja y enjuagar. Si el material es bronce en cualquier limpia-metales es apto, frotarlo cuidadosamente con un paño suave, y luego sacar brillo. Si son de arcilla, un cepillo suave seco y otro más duro para los recovecos.
Si las esculturas están en el exterior, personalmente pienso que lo mejor es dejar que el tiempo haga lo suyo y le vaya dando esa pátina característica que le imprimirá un sello inconfundible.
Consejo final: si tu obra ha sufrido algún daño importante no te aventures a restaurarla a menos que sepas lo que haces, llévala a un restaurador profesional.
Cómo cuidar obras de arte, cómo embalar una escultura, limpiar cuadros al óleo, limpiar un cuadro al acrílico, cómo transportar una escultura, consejos para cuidar obras de arte, transporte de cuadros y esculturas
Cómo cuidar obras de arte, cómo embalar una escultura, limpiar cuadros al óleo, limpiar un cuadro al acrílico, cómo transportar una escultura, consejos para cuidar obras de arte, transporte de cuadros y esculturas
